¿Cuál es la temperatura ideal para estudiar?

Oliver Romero
Oliver Romero

Sin lugar a dudas, para que una persona se pueda concentrar es necesario que esté en un ambiente agradable. El calor y el frío impiden que la persona esté en un ambiente agradable y en consecuencia se pueda concentrar.

Si quieres saber cómo aprovechar al máximo el tiempo que vas a dedicar a estudiar, es fundamental que la temperatura de la estancia sea la adecuada. Si a una buena temperatura le sumamos pocas distracciones y una iluminación adecuada, podemos tener la certeza de que vamos a obtener muy buenos resultados.

Temperatura ideal para estudiar

Teniendo en cuenta las opiniones de los expertos, si realmente queremos concentrarnos en los estudios es importante que la temperatura sea agradable. Cuanto más extrema es la temperatura, el cuerpo menos se puede relajar y en consecuencia más complicado es conseguir aumentar la concentración en los estudios.

Según los últimos estudios, la temperatura adecuada para disfrutar de una buena sesión de estudio se recomienda que la temperatura esté entre los 20 y 23 grados. Cuanta más diferencia haya por arriba o por abajo, más complicado será comenzar a concentrarse y en consecuencia sacar un buen rendimiento de estudio.

Como nos indican los expertos, la temperatura es muy importante para conseguir un buen grado de concentración. Pero también es importante tener en cuenta la comodidad, iluminación y las posibles distracciones. Lo importante es tener claro que cuando vamos a estudiar, vamos a estudiar y no perder el tiempo. Es vital quitarse de la cabeza la idea de sentarse en la silla para que las otras personas piensen que estamos estudiando. Esa tendencia no beneficia a nadie y perjudica mucho a la persona que está simulando estudiar y realmente no lo está haciendo.

Comentado ese detalle, pasamos a mostrarte algunos consejos que te ayudarán a tener la certeza de que vas a conseguir un ambiente agradable y así vas a tener la temperatura adecuada para estudiar.

Cómo estudiar con calor: consejos prácticos

Cuando tenemos calor, el cuerpo trata de evitar el ejercicio y por ese motivo tiende a negarse a disfrutar de una sesión de estudio. Si te encuentras en la época veraniega, hace calor y eres consciente de que tienes que estudiar para sacar los exámenes adelante puede ser una buena idea que pongas en práctica los siguientes consejos.

1- Apuesta por la climatización

Si vives en zonas calurosas como Valencia, te recomendamos instalar aire acondicionado en tu vivienda. De esa manera siempre conseguirás una temperatura adecuada y en consecuencia podrás estudiar con más facilidad. Para instalar aire acondicionado solo deberás ponerte en contacto con los expertos de Tsclima. Ellos se encargarán de recomendarte el mejor sistema de climatización. Así estarás muy a gusto en tu casa y podrás sacar mucho más rendimiento al periodo de estudio.

2- Elige la mejor habitación

Si no es posible poder instalar aire acondicionado, siempre deberás elegir la estancia más fresca para estudiar. Personalmente te recomiendo elegir una habitación con poca radiación solar, pero con una buena iluminación.

3- Apuesta por el ventilador

El ventilador en ausencia del aire acondicionado puede ser una buena opción para sentir algo más de fresco y conseguir estudiar mejor.

El ventilador en muchas ocasiones puede llegar a ser muy eficaz a la hora de mantener la concentración, de aquí que sea una herramienta muy útil.

4- Elige las horas adecuadas

Evita estudiar en las horas centrales del día en las cuales hace más calor. Para evitar el exceso de calor, se recomienda estudiar a primeras y últimas horas del día. Lo importante es intentar disfrutar del estudio en las horas más frescas. Hay algunas personas que incluso estudian por la noche para evitar el exceso de calor.

5- Hidratación y pausas

Es importante hidratarse correctamente y realizar algunas pasas para refrescarse. Por ejemplo, por cada hora de estudio podemos dedicar cinco minutos a refrescarnos. Así el cuerpo bajará la temperatura y podrá seguir estudiando con más facilidad.

Cómo estudiar con frío: tips que funcionan

No siempre es posible estudiar con la ayuda de la calefacción. El frío hace que el cuerpo se ralentice y en consecuencia no podamos sacar el máximo provecho al tiempo de estudio. Para conseguir mantener el cuerpo a una temperatura agradable te vamos a mostrar algunos tips.

  • Abrigarse: sin lugar a dudas, si no puedes tener calefacción en casa, intenta estudiar con varias capas. Las capas te permitirán mantener mejor la temperatura del cuerpo y así tendrás menos sensación de frío.
  • Bebidas calientes: beber es importante. Aprovecha para tomar bebidas calientes con las cuales dar un plus de temperatura al cuerpo. Puedes optar por un vaso de leche caliente, caldo… Lo que sí podemos decirte es que tener una taza caliente en las manos te ayudará a tener menos sensación de frío. Es decir, podrás concentrarte mejor en los estudios.
  • Calentar las manos: si las manos están frías, el cuerpo comenzará a sufrir y no podrás concentrarte en los estudios. En cuanto tengas síntomas de que las manos están frías, será el momento de buscar un remedio para calentarlas. Puedes optar por una estufa, hornalla… Incluso los guantes pueden ayudarte a mantener la temperatura, siempre y cuando no tengas que hacer muchas cosas con las manos.
  • Cierra las puertas: con el objetivo de mantener la temperatura de la estancia, te recomendamos cerrar la puerta de la habitación. Así evitarás que el calor se vaya al exterior y en consecuencia podrás mantener una temperatura un poco más agradable. Recuerda, el uso elevado de sistemas de calefacción tampoco es bueno debido a que puede provocar cansancio o incluso dolor de cabeza. La calefacción siempre se debe usar con moderación.
  • Ventilación: cuando llevamos varias horas de estudio el ambiente comienza a cargarse. En ese momento te recomendamos ventilar un poco la habitación para renovar el aire. El aire fresco te permitirá concentrarte mejor. Pocas personas lo hacen porque baja la temperatura, pero la renovación del aire es fundamental para conseguir un ambiente más agradable. Con cinco minutos de ventilación suele ser más que suficiente para conseguir aire fresco para estudiar.