Ventajas de la escritura a mano y de tomar notas en papel

La tecnología ha traído numerosas ventajas en la vida diaria, haciendo más sencilla y rápida la comunicación, tanto con fines profesionales como personales. No obstante, se han perdido algunas costumbres, entre las que destaca la escritura a mano.
En un estudio realizado en 2014, se indicaba que en España menos del 60% de las personas escribían a mano de manera regular, contra un 75% que lo hacía en formato digital. Esto puede llegar a afectar algunas capacidades cognitivas asociadas al proceso de la manoescritura.
Cuando escribes a mano, el cerebro desarrolla conexiones que lo hacen mucho más plástico para afrontar distintas habilidades como la concentración y la creatividad. Por tanto, es imprescindible que los niños sigan aprendiendo la escritura manual y que tomes notas en papel, para mantener una mayor agilidad mental.
Ventajas de escribir a mano
Cuando un niño aprende a escribir, desarrolla diversos procesos en su cerebro, como el desarrollo motor. Este se inicia cuando el cerebro hace conexión con la mano, en un proceso coordinado entre lo que se dicta y se escribe.
Además, se activan muchos otros procesos tanto en el área visual como cognitiva o de la memoria, la cual trae numerosas ventajas, como:
Se fortalece el razonamiento lógico
Al escribir a mano, el cerebro trabaja en vincular ideas tanto de lo aprendido con la información que se recibe en el presente. De tal manera, que cuando se unen las letras para construir las palabras y oraciones que tengan coherencia, se pone en práctica tanto la abstracción como la lógica.
El proceso de escritura a mano lleva a tu cerebro a tomar decisiones de manera rápida, a fin de dar solución a la forma en que quiere expresar sus ideas y pensamientos. Asimismo, favorece la creatividad y la capacidad de responder ante situaciones inesperadas.
Facilita el proceso de aprendizaje
Se ha visto que aquellos niños que desarrollan habilidad en la escritura, demoran más tiempo en aprender a leer. Esto se ha relacionado con el hecho de que al escribir, se logra retener una mayor cantidad de información y se producen nuevas ideas con más facilidad.
En el proceso de escritura a mano, la persona está realiza un constante de análisis y síntesis, que ayuda a que el cerebro estructure mucho mejor las ideas y sea capaz de expresarlas con palabras. Además, como la manoescritura es más lenta que con el teclado, hay tiempo de priorizar conceptos y se suele tener que replantear la información recibida para plasmarla en el papel.
Desarrolla la memoria
Una de las ventajas de la escritura a mano, es que debes utilizar tanto una memoria visual como la verbal. Al trabajarlas en conjunto, las mismas se refuerzan y eras capaz de retener la información que estás transcribiendo por mucho más tiempo.
La escritura manual genera imágenes en dos dimensiones, que el cerebro identifica y suele almacenar como algo importante. Por otra parte, al escribir se suele dar coherencia a las ideas sueltas, lo que hace que tengan una estructura que la mente es capaz de fijar con mayor facilidad.
Contribuye a mejorar la concentración
Al escribir manualmente, sueles enfocarte en la actividad que estás desarrollando y no sufrir distracciones por elementos externos. En el formato digital, hay otros estímulos visuales que no te permiten dirigir tu atención a las ideas que estás construyendo.
Además, la escritura a mano evita que te dediques a varias tareas a un mismo tiempo, ya que para construir las palabras, tienes que centrar tu pensamiento en esta actividad. Esto se debe a que debes hacer varias acciones a la vez, como sujetar correctamente el elemento para escribir, pensar en lo que quieres expresar, visualizar estos conceptos y plasmarlos en el papel.
Estimula la actividad cerebral
Al escribir a mano, tienes que utilizar áreas del cerebro implicadas en las actividades motoras, visuales y del conocimiento. Esto hace que la actividad de las neuronas sea mucho más activa, lo que contribuye a prevenir o reducir el riesgo de aparición de algunas enfermedades asociadas al deterioro cognitivo.
También, se considera que la escritura manual estimula tu capacidad de enfrentarte a situaciones inesperadas. Cuando escribes, tu cerebro debe tomar decisiones a cada momento, lo que lo hace mucho más flexible y capaz de buscar soluciones innovadoras.
¿Cuál es el mejor papel para apuntes?
Lo más recomendable es utilizar papel blanco, ya que en este va a resaltar mejor la escritura tanto en lápiz como bolígrafo. El más usado es el multifunción o papel bond, con un gramaje entre los 75 hasta 115 gramos/m², que le dan una buena resistencia.
En cuanto al formato, depende en gran medida del gusto de la persona, pero uno de los más populares es el A4. Para los apuntes, se suelen usar blocs, libretas o cuadernos, que brindan un mejor soporte a la hora de escribir y permiten tener toda la información de forma más accesible y ordenada.
Para aquellos que buscan papel blanco de calidad para tomar apuntes, en Dical.es, encontrarás una gran variedad de tipos de la mejor calidad. Con gramajes que van desde los 80 hasta 490 gramos/m² y distintos tratamientos, que se ajustan a las necesidades del usuario.
¿Cómo escribir más rápido a mano?
Uno de los principales inconvenientes de la escritura a mano, es que el proceso suele ser mucho más lento en comparación que la escritura digital. Esto hace que se dificulte tomar apuntes en clase o notas en una entrevista, llegando a perderse información.
Hay diversas estrategias que pueden ayudarte a mejorar la velocidad de escritura y poder tomar todos los datos que requieres. Unas tienen que ver con el uso de las herramientas más adecuadas y otras con las técnicas de escritura que aplicas, entre las que te recomendamos:
- Toma una buena postura al sentarte, que te haga sentirte cómodo y no sufrir molestias en la espalda al inclinarte para escribir. Revisa que tanto tus caderas como la región lumbar estén bien apoyadas en la silla y tus rodillas y codos flexionados con comodidad.
- Al momento de escribir debes usar lápices o bolígrafos sobre los que no tengas que ejercer una gran presión al momento de escribir. Una de las opciones más confortables son los lapiceros con tinta de gel, los cuales se deslizan muy rápidamente en el papel.
- Debes aprender a sujetar el lápiz o bolígrafo de una forma ergonómica, para que puedas manipularlo con mayor facilidad. También prueba distintas formas de inclinación del papel, hasta que te ajustes a la que te hace ir más rápido.
- Utiliza algún sistema de escritura de símbolos como la taquigrafía. Esta es muy útil para apuntes personales o tomar notas que luego deberás transcribir, pero no puedes usarla al momento de presentar una prueba o entregar una asignación escrita.
- En el caso de los apuntes o recoger ideas para hacer un trabajo posterior, una buena técnica es realizar esquemas. Puedes escribir las ideas principales y ayudarte con dibujos y flechas que las conecten, para que posteriormente las puedas desarrollar.
- Cuando tienes un tiempo determinado para escribir un texto, ya sea un ensayo o una prueba, lo mejor es tomar unos minutos para planificar el desarrollo del mismo. Esto hará que tus ideas estén más organizadas y puedas plasmarlas en el papel en menor tiempo.
- Aunque la escritura a mano contribuye a tu concentración, es conveniente que elimines algunos focos de distracción. Por ejemplo, no enciendas el televisor, mantén alejado el teléfono móvil o coloca una música relajante.
- Es necesario practicar constantemente para adquirir una mayor agilidad al escribir a mano. Por tanto, es recomendable que dediques al menos 20 minutos al día a plasmar tus ideas por escrito.
¿Cómo escribir rápido a mano sin cansarse?
Al llevar mucho tiempo escribiendo a mano, es frecuente que la persona se sienta cansada y se hace más lenta al plasmar las palabras en el papel. Esto puede ser inconveniente cuando tienes un tiempo limitado para expresar tus ideas, como cuando haces una prueba escrita, tipo ensayo o presentas oposiciones.
Para evitar perder rapidez por cansancio, hay algunas técnicas que puedes aplicar y te ayudarán a suavizar tus manos. Además, no perderás calidad en la caligrafía, por lo que tu letra seguirá siendo legible:
- Es básico que mantengas una buena postura, ya que si la inclinación del cuerpo es excesiva, comenzarás a sentir molestias en la zona lumbar.
- Antes de comenzar a escribir, haz estiramientos tanto de los brazos como hombros y manos, a fin de que se mantengan más flexibles y tengas mayor agilidad.
- Cuenta con una superficie sólida y lisa en la cual apoyar el papel. Esto hará que el trazo sea mucho más fluido y requieras un menor esfuerzo.
- Para tomar apuntes o notas, utiliza un bloc o cuaderno a rayas, lo que te ayudará a que las letras sigan una misma dirección y tenga un tamaño uniforme.
- Al escribir usa tanto los músculos del hombro como los de los dedos al presionar el lápiz y hacer el trazo. Para estar seguro de que lo haces correctamente, observa si tus hombros y antebrazos se mueven al escribir.
- Utiliza libros de ejercicios que te ayuden a lograr un estilo de escritura con secuencias más sencillas. De esta manera, terminarás haciendo menor esfuerzo en el trazo y te cansarás menos al escribir rápido.